El ágata energiza el aura, disipa la negatividad e instala paz en el corazón. Es la piedra de la paz. Puede usarse en los desórdenes del sistema nerviosos y ayuda a desintoxicar el cuerpo.
Aminora el estrés, la depresión y la ansiedad.
Estimula en la autoexploración del «yo».
Ayuda a ser creativo, a mantener una mentalidad firme y consciente.
Se relaciona con el chakra de la coronilla (7º)
Elemento: Tierra
Asociación astrológica: Esorpión
Vibra con el Nº 3
Potencia la memoria celular y la sanación multidimensional ayuda a desintoxicar y a tratar la depresión, la infertilidad, el cerebro, la asimilación de oxígeno, el pecho , la piel y los sistemas nerviosos y circulatorio. Resulta útil para reprogramar la memoria celular después de haber mortificado la carne, las emociones o el espíritu en una vida anterior o en el presente.